Federación de Servicios a la Ciudadanía de CCOO | 19 abril 2024.

Representantes de CCOO se encierran en el Ministerio de Empleo y Seguridad Social

    La representación de CCOO en el Ministerio de Empleo y Seguridad Social se mantiene desde las 12:30 horas frente al despacho de la ministra Báñez, en la sede central del departamento en Nuevos Ministerios, para exigir que reconozca la precaria situación que sufren el SEPE y FOGASA, con el objetivo de que se comprometa con el futuro de estos organismos y se ponga al frente en la búsqueda de las soluciones que necesitan.

    14/02/2018.
    Representantes de CCOO se encierran en el Ministerio de Empleo y Seguridad Social

    Representantes de CCOO se encierran en el Ministerio de Empleo y Seguridad Social

    La Sección Sindical de CCOO en el Ministerio de Empleo y Seguridad Social denuncia el deterioro de los diferentes centros de trabajo del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) y del Fondo de Garantía Salarial (FOGASA), que puede llegar a ser irreversible si no se cierran de forma decidida y urgente las soluciones necesarias.

    “En estos momentos, desde las 12:30 horas de la mañana, estamos a la puerta del despacho de la ministra Fátima Báñez y pretendemos mantenernos aquí hasta que encuentre el tiempo suficiente para recibirnos y tratar de buscar las soluciones posibles a una situación insostenible en el SEPE y FOGASA. CCOO lo viene intentando con insistencia desde hace un par de meses pero hasta la fecha no parece que la cuestión se encuentre entre sus prioridades. Esperemos que seamos capaces de convencerla de la importancia de estas dos estructuras del Estado y con ello abrir un proceso de negociación que sirva para salvar la amenaza de ruina que afecta a ambos organismos”.

    La plantilla estructural de estos organismos se ha reducido, durante el periodo de crisis, en más de un 11%. Se han perdido aproximadamente 800 empleos, mientras que en paralelo las cargas de trabajo han venido a duplicarse, e incluso, a triplicarse durante dicho periodo.

    La carga de gestión ha crecido durante los momentos álgidos de la crisis hasta picos impensables. Pero incluso, en un momento como el actual, con un marco económico sensiblemente mejor, se demuestra que la acumulación de reformas laborales propicia un uso intensivo de las prestaciones por desempleo, que han pasado de 396.998 solicitudes mensuales en 2005 a 660.832 en 2017, lo que supone un incremento del 166% sobre la gestión.

    El Ministerio de Empleo y Seguridad Social presta escasa atención a los más de 800 centros de trabajo de estos organismos, muchos de ellos con plantillas ridículas. De hecho, el 28,5% cuenta con tres o un número inferior de efectivos. El impacto de la pérdida de puestos de trabajo es diferente en función de cada provincia, aunque en todas ellas el servicio a la ciudadanía se ve amenazado.

    La presión que sufre la plantilla, cuyo esfuerzo es lo que está salvando la gestión, es insoportable y día a día crece el número de personas de la misma cuyo único objetivo es abandonar estos organismos.

    Ante este fenómeno de desertización de plantilla en el SEPE y en FOGASA, las decisiones del Gobierno han sido equivocadas. Se han limitado derechos como era la posibilidad de participar en los concursos de traslados, lo que ha colaborado a empeorar la imagen de estos organismos en el interno de la Administración General del Estado. Si a ello se unen los bajos niveles salariales —más de 4.200 efectivos están por debajo de los mil euros—, no es de extrañar que sea difícil contar con efectivos de esta Administración, la del Estado, dispuestos a incorporarse a estos centros de trabajo.

    Para CCOO no es posible esperar más tiempo, salvo que se apueste por quebrar y hacer desaparecer ambos organismos. Es fundamental construir una propuesta que incorpore plantilla y que supere todas las deficiencias estructurales existentes.

    Estas son las razones que han llevado a la sección sindical de CCOO a dirigirse a la ministra para que, de una vez por todas, se comprometa a superar la parálisis que se sufre en estos dos organismos desde hace diez años.