Concentración a las puertas del departamento de Asuntos Sociales como condena a la muerte violenta de Blanca E. Marques. IÑIGO ALZUGARAY
Delegados y delegadas de CCOO de Navarra se han concentrado este mediodía frente a la sede del sindicato para denunciar públicamente la muerte de Blanca Marqués, vecina de Burlada y antigua delegada de CCOO, por violencia de género, según la confesión de su pareja, que asegura haberla estrangulado y arrojado al río Arga.
A través de este acto, el sindicato ha querido mostrar su solidaridad con los familiares, compañeros y compañeras de trabajo y amigos de la víctima y expresar un contundente rechazo a la insoportable violencia contra las mujeres; una sangrante consecuencia de la discriminación y de la ausencia de prevención, protección y derechos necesarios para combatir lo que constituye una flagrante violación de los derechos humanos.
Pilar Arriaga, secretaria de la Mujer de CCOO, ha afirmado que la violencia de género debe considerarse una cuestión de Estado y debe acabarse con esta lacra social desde las políticas públicas: "Los recortes en políticas de igualdad y contra la violencia de género que han tenido lugar durante los últimos años, sumados a la falta de compromiso en la prevención, impiden reducir la violencia estructural que se ha visto agravada por factores como el desempleo de las mujeres, la precariedad laboral, la feminización de la pobreza o la desprotección social".
Juanjo Bueno, amigo de la víctima, también ha estado presente en la concentración y ha pedido justicia para Blanca: "No queremos venganza, pero sí justicia. El que ha cometido esta atrocidad que la pague". Bueno ha resaltado que Blanca era una persona "increíble". "Ella me ha ayudado muchísimo, y hoy he sacado fuerzas para estar presente en esta concentración para dar la cara por ella y por sus derechos porque sé que es lo que a ella le gustaría y sé que estaría orgullosa. Espero que esto no vuelva a ocurrir nunca, no puede haber ni una víctima más".
Más partidas presupuestarias
Siguen existiendo déficits en la atención integral, que deben ser corregidos si queremos asegurar la protección a las víctimas y su integración a una vida sin violencia. Las partidas presupuestarias comprometidas en el Plan para luchar contra la violencia sexista en los próximos años (2016-2021) deben ser evaluadas para corregir los déficits detectados en el ámbito laboral, educativo, policial, judicial, sanitario etc. Combatir la violencia contra las mujeres debe considerarse una cuestión de Estado, que debe implicar al conjunto de la sociedad, también a CCOO: "Por esta razón, pedimos políticas públicas reales a la Administración, reiteramos nuestro compromiso permanente de colaboración con el Gobierno de Navarra, las entidades locales y organizaciones implicadas en el desarrollo de las medidas que cita el Plan de Acción elaborado recientemente por el Instituto Navarro de Igualdad, y que permitan la prevención y erradicación de la violencia contra las mujeres".