Federación de Servicios a la Ciudadanía de CCOO | 29 marzo 2024.

Una ley impide a FSC-CCOO ofertar cursos de formación

    Como consecuencia de la aprobación de la Ley 30/2015, por la que se regula el Sistema de Formación para el Empleo en el ámbito laboral, los agentes sociales han quedado excluidos de la ejecución de acciones formativas, al no poder ser promotores de planes de formación para el empleo.

    29/01/2016.

    Por tanto, no volverán a ofertarse cursos de formación para el empleo (ni en la modalidad a distancia ni en la presencial) promovidos por FSC-CCOO. Esta circunstancia es ajena a la voluntad de esta Federación, pero la normativa vigente nos impide seguir formando directamente a los trabajadores y trabajadoras tanto del ámbito de lo público como de lo privado.

    FSC-CCOO lamenta esta nueva situación, pues la formación ha sido un vehículo fundamental en la acción sindical y en la negociación colectiva federal, siendo un derecho de los trabajadores y las trabajadoras que, con el nuevo sistema de concurrencia competitiva se va a ver afectado.

    En el caso de los planes que se formulen bajo el Acuerdo de Formación continua de las Administraciones Públicas, será cada Administración la que forme a su propio personal. En lo que respecta a los planes promovidos por la Fundación Tripartita, aún no ha habido convocatoria del año 2015 ni del 2016. Desconocemos si los fondos procedentes del año 2015 van a poder aplicarse en una posible convocatoria, pues la ley no permite la reanualización de estos créditos.

    En cualquier caso, seguiremos trabajando y negociando en los distintos ámbitos todas las posibilidades para intentar poder seguir proporcionando formación dentro de lo establecido por la vigente normativa.

    Esperamos que el nuevo sistema sea capaz de cubrir las necesidades formativas globales del conjunto de las trabajadoras y trabajadores, y que los nuevos promotores de planes desarrollen estos con la misma dedicación, seriedad, rigor y profesionalidad que CCOO ha demostrado durante los últimos 20 años. 

    Deseamos no ver la formación convertida en un negocio que obvie las necesidades reales y que no se olvide que es, sobre todo, un derecho laboral que permite el acceso, la promoción y el reciclaje de todas las personas en su puesto de trabajo.